Tuesday

¡Ave Caesar, morituri ad nauseam te salutant!


Hoy voy a explicar una suerte de sueño que me sobrevino esta misma tarde, mientras dormia eso que llamamos siesta. Es un sueño, cuanto menos, pedante. Muy pedante. No se donde estaba, ni casi quien era realmente, pero andaba por un camino sorteado de arboles a ambos lados, y de pronto, me encuentro con varios personajes. Despues de haber visto los arboles, cuando me dirijo a ellos, soy ciego y se que soy ciego, y asi se lo comunico, ya que al decirme sus nombres, revelo el mio como Ho-meros, el ciego en griego. Ahi esta el punto pedante del asunto. No soy Homero, nunca lei Homero; bueno algo si, pero no lei la Iliada ni la Odisea por ejemplo, textos clasico donde los haya. Empeze la Odisea..
"Háblame, Musa, de aquel varón de multiforme ingenio que, después de destruir la sacra ciudad de Troya..."

pero no pude acabarla. Ni siquiera continuarla. No por aburrimiento, sino por dejadez. Por eso me sorprende el hecho de que soñara tal estupidez. Una mujer importante en mi vida me explico los diversos significados del nombe Homero (ho-meros, el ciego, es el que recuerdo), pues habia hecho un trabajo, con oca y todo, de la citada Odisea. El quid es que esta tarde, me levante sobresaltado, por el hecho de reconocerme Homero en el sueño, sin haber escrito nada interesante en mi vida, sin ser ni siquiera, escritor. Ademas el ciego en Grecia tiene la connotacion de poseer el favor de los dioses, para ver el futuro, asi como la incapacidad de ver el presente. Pero yo vi arboles, y mis ropajes eran tunicas rasgadas. No acabo de entenderlo, aunque me parecio oportuno escribirlo, tal cual. ¿Tienen un poder revelador los sueños? Si es así, soy un pedante, de capa y espada, y ole.