Hermocrates, sobre la droga
Text traduït al castellà del grec antic. Manuscrit informal que data del 10d.C., trobat en unes excavacions arqueològiques a prop de l'antic complexe religios de Delfos.
Estimados errantes subterraneos, debido a la oportunidad que me brindan en una sesion de reflexiones sobre ser y no ser, estar o no borracho, o decepcionado expondre ciertos temas de la filosofia clasica y del alcoholismo hecho profesion.
Me presentare como es debido. ¿Donde estan mis modales de viejo, barbudo y clasico? Soy Hermocrates, resurgidor profesional de la antigua cultura helénica y erudito dispuesto a revelaros una de las verdades que Pitias, el jodido, a la par que mitico oraculo de Delfos, solo confesaba entre amigos y con cuatro copas de mas.
Esto que permanece escrito, como mensaje subliminar que debereis olvidar despues de leerlo, simplemenete quiere penetrar en vuestros subconscientes y si sois feminas mejor, por lo de penetrar digo, para confiaros un secreto, el secreto de la vida. El unico secreto que ni siquiera los mas sabios rabinos han descubierto jamas. No se trata ni del cielo, no del infierno, ni de un dios vengativo o complaciente, ni de rezos o lloriqueos teologicos; se trata del locus amoenus intelectual del individuo contemporaneo, a saber: la droga.
La droga, que a muchos les parecera una palabra con necesarias connotaciones negativas, esta extendida por todas partes y entre la mayoria de especimenes de la raza humana (tm), no solo en aquello que llamamos drogas con estupida e insultante normalidad, para diferenciarlas de las que la sociedad cree que no lo son, pero que al final acaba siendo nada mas lejos de la verdad. Todo aquello que siendo un agente externo, substituye al propio agente interno, al ego y su maquinaria racional, y lo modifica, ya sea quitandole el pasado trabajo de procesar informacion (pensar) o proporcionandole nueva informacion a procesar, como los alucinogenos o la televison por cable, es una droga en toda regla. Volviendo a las connotaciones, no afirmo rotundamente que esta modificacion sea negativa siempre ni al 100% pero si, cambia el modo de ver y de sentir del sujeto que la experimenta, como piloto de autos-de-choque emocionales y perceptivos. Este cambio puede ser bueno en un principio para este individuo que ve su nivel de percepcion extrapolado, sublimado y capaz de captar mas y mejor su entorno y su propio ser. Esta es una droga que puede beneficiar a este individuo en tanto que hace que se eleve de su vil condicion material hacia nuevas experiencias extrasensoriales. De hecho asi nos lo montabamos en los viejos tiempos con Pitias en Delfos, y con las rendijas de las que emanaba un gas pitico, que nos ponia a todos a cien, joder.
En Delfos, lo gracioso era la gente que convencida del poder adivinatorio del oraculo, que recuerdo era colega nuestra de tajas y delirios, que simplemente se limitaba a inhalar estos gases y pronunciar enunciados que podian ser interpretados por los escribanos como profeticos, pero que en realidad eran mas bien alucinogenos, sino, pateticos. Sin embargo, esta gente de la que hablo, que acudia convencida a Delfos, era la que padecia de una drogadiccion mayor que la nuestra, puesto que la droga que ellos tomaban, no era externa, o almenos no ahora. Habia sido insertada en ellos a traves de infinitos discursos religiosos y publicitariamente teologicos, sobre el poder de los augures de Delfos. Ellos estaban drogados, creian en una verdad y acudian a ella, hasta el puto monasterio-templo-teatro-y-zona-recreativa de Delfos.
Esos eran los yonquis verdaderos, los que tenian ya introducida la droga tan dentro, mas alla de su propio sistema circulatorio, que no era ni externa, era una propia secrecion de su intelecto la que los ligaba a ciertas practicas, como si de la droga mas feroz se tratara. Esta es la droga mala, la propia, de las externas, no os preocupeis, en Delfos las tomabamos todas y sorprendentemente pasamos a la historia como tios cojonudos. Incluso mi colega Socrates se reia de que algun dia pudieramos hacer historia. De aquellas muchas borracheras y fiestas drogoadictivas salio una frase que hizo famoso al oraculo, como centro de la reunion y que despues el propio Socrates daria a conocer. Conocete a ti mismo y podras saborear todo tipo de drogas. Lastima que el era un poco serio, y olvido a dredes la segunda parte.
En fin aqui acaba mi relato estupido, etilico y sin sentido de esta noche, des de la cultura clasica y el olvido mas absoluto.
Por cierto no debe haber ni un jodido acento, porque en griego no conocemos esto de escribir los acentos en lenguaje latino y tantas mariconadas de soplapollas conquistados*
Buenas noches.
Parakalo
Hermòcrates...
*Joder a grecia la conquistaron igual que a hispania, pero como minimo no empezamos a chuparnos las pollas para ser romanos y usar su puto lenguaje de retrasado mental. Que si rosa rosa rosae.. bah
Estimados errantes subterraneos, debido a la oportunidad que me brindan en una sesion de reflexiones sobre ser y no ser, estar o no borracho, o decepcionado expondre ciertos temas de la filosofia clasica y del alcoholismo hecho profesion.
Me presentare como es debido. ¿Donde estan mis modales de viejo, barbudo y clasico? Soy Hermocrates, resurgidor profesional de la antigua cultura helénica y erudito dispuesto a revelaros una de las verdades que Pitias, el jodido, a la par que mitico oraculo de Delfos, solo confesaba entre amigos y con cuatro copas de mas.
Esto que permanece escrito, como mensaje subliminar que debereis olvidar despues de leerlo, simplemenete quiere penetrar en vuestros subconscientes y si sois feminas mejor, por lo de penetrar digo, para confiaros un secreto, el secreto de la vida. El unico secreto que ni siquiera los mas sabios rabinos han descubierto jamas. No se trata ni del cielo, no del infierno, ni de un dios vengativo o complaciente, ni de rezos o lloriqueos teologicos; se trata del locus amoenus intelectual del individuo contemporaneo, a saber: la droga.
La droga, que a muchos les parecera una palabra con necesarias connotaciones negativas, esta extendida por todas partes y entre la mayoria de especimenes de la raza humana (tm), no solo en aquello que llamamos drogas con estupida e insultante normalidad, para diferenciarlas de las que la sociedad cree que no lo son, pero que al final acaba siendo nada mas lejos de la verdad. Todo aquello que siendo un agente externo, substituye al propio agente interno, al ego y su maquinaria racional, y lo modifica, ya sea quitandole el pasado trabajo de procesar informacion (pensar) o proporcionandole nueva informacion a procesar, como los alucinogenos o la televison por cable, es una droga en toda regla. Volviendo a las connotaciones, no afirmo rotundamente que esta modificacion sea negativa siempre ni al 100% pero si, cambia el modo de ver y de sentir del sujeto que la experimenta, como piloto de autos-de-choque emocionales y perceptivos. Este cambio puede ser bueno en un principio para este individuo que ve su nivel de percepcion extrapolado, sublimado y capaz de captar mas y mejor su entorno y su propio ser. Esta es una droga que puede beneficiar a este individuo en tanto que hace que se eleve de su vil condicion material hacia nuevas experiencias extrasensoriales. De hecho asi nos lo montabamos en los viejos tiempos con Pitias en Delfos, y con las rendijas de las que emanaba un gas pitico, que nos ponia a todos a cien, joder.
En Delfos, lo gracioso era la gente que convencida del poder adivinatorio del oraculo, que recuerdo era colega nuestra de tajas y delirios, que simplemente se limitaba a inhalar estos gases y pronunciar enunciados que podian ser interpretados por los escribanos como profeticos, pero que en realidad eran mas bien alucinogenos, sino, pateticos. Sin embargo, esta gente de la que hablo, que acudia convencida a Delfos, era la que padecia de una drogadiccion mayor que la nuestra, puesto que la droga que ellos tomaban, no era externa, o almenos no ahora. Habia sido insertada en ellos a traves de infinitos discursos religiosos y publicitariamente teologicos, sobre el poder de los augures de Delfos. Ellos estaban drogados, creian en una verdad y acudian a ella, hasta el puto monasterio-templo-teatro-y-zona-recreativa de Delfos.
Esos eran los yonquis verdaderos, los que tenian ya introducida la droga tan dentro, mas alla de su propio sistema circulatorio, que no era ni externa, era una propia secrecion de su intelecto la que los ligaba a ciertas practicas, como si de la droga mas feroz se tratara. Esta es la droga mala, la propia, de las externas, no os preocupeis, en Delfos las tomabamos todas y sorprendentemente pasamos a la historia como tios cojonudos. Incluso mi colega Socrates se reia de que algun dia pudieramos hacer historia. De aquellas muchas borracheras y fiestas drogoadictivas salio una frase que hizo famoso al oraculo, como centro de la reunion y que despues el propio Socrates daria a conocer. Conocete a ti mismo y podras saborear todo tipo de drogas. Lastima que el era un poco serio, y olvido a dredes la segunda parte.
En fin aqui acaba mi relato estupido, etilico y sin sentido de esta noche, des de la cultura clasica y el olvido mas absoluto.
Por cierto no debe haber ni un jodido acento, porque en griego no conocemos esto de escribir los acentos en lenguaje latino y tantas mariconadas de soplapollas conquistados*
Buenas noches.
Parakalo
Hermòcrates...
*Joder a grecia la conquistaron igual que a hispania, pero como minimo no empezamos a chuparnos las pollas para ser romanos y usar su puto lenguaje de retrasado mental. Que si rosa rosa rosae.. bah